JOSEP BERNABEU
El 99,88% de las empresas que existen en España son pymes: 3.139.106 sobre un censo de 3.142.928. Según el Retrato de las Pyme 2014 que edita la Dirección General de Industria y de la Pyme, el 95,7% de estas empresas no superan los 9 empleados (3,6 puntos por encima de la media de la UE), el 3,6% tienen entre 10 y 49 empleados (3 puntos por debajo de la media de la UE) y el 0,6 % entre 50 y 249 empleados (medio punto por debajo de la media europea). Pese a la gran atomización empresarial que existe, la pequeña y mediana empresa española emplea al 63% de los trabajadores del país.
Además de generar mucho más empleo que las grandes empresas, las pymes tienen un gran potencial de crecimiento, tanto a nivel interno como en el ámbito dela exportación. Pocoa poco las pequeñas y medianas empresas van recuperando el pulso en buena medida gracias a la recuperación del crédito bancario. Después de más de un lustro de restricciones al crédito, las entidades financieras han vuelto a abrir el grifo del dinero y eso se nota.
A pesar de que últimamente han aparecido otras fórmulas alternativas de financiación como el crowdfunding (plataformas online de financiación), los business angels (inversores de proyectos incipientes) y otras (prestamos por Internet, fondos de inversión clubes de inversores, etc.), el 80% de la financiación de las empresas sigue dependiendo de los bancos. Una buena financiación es la base del éxito de cualquier empresa, pero no lo es todo. Para crecer y lograr el máximo liderazgo las pymes necesitan financiación y también herramientas que faciliten su desarrollo y contribuyan a reducir los obstáculos que lo dificultan.
Además de generar mucho más empleo que las grandes empresas, las pymes tienen un gran potencial de crecimiento, tanto a nivel interno como en el ámbito dela exportación. Pocoa poco las pequeñas y medianas empresas van recuperando el pulso en buena medida gracias a la recuperación del crédito bancario. Después de más de un lustro de restricciones al crédito, las entidades financieras han vuelto a abrir el grifo del dinero y eso se nota.
A pesar de que últimamente han aparecido otras fórmulas alternativas de financiación como el crowdfunding (plataformas online de financiación), los business angels (inversores de proyectos incipientes) y otras (prestamos por Internet, fondos de inversión clubes de inversores, etc.), el 80% de la financiación de las empresas sigue dependiendo de los bancos. Una buena financiación es la base del éxito de cualquier empresa, pero no lo es todo. Para crecer y lograr el máximo liderazgo las pymes necesitan financiación y también herramientas que faciliten su desarrollo y contribuyan a reducir los obstáculos que lo dificultan.